Cuando se trata de Inteligencia Artificial, las expectativas que les ponemos a veces superan con creces sus capacidades. Un ejemplo es ChatGPT, un modelo de lenguaje que muchos de nosotros esperamos «pensar» en lugar de «hacer». Sin embargo, la verdad es que, como cualquier empleado o pasante, necesita la formación y orientación adecuadas para ser eficaz.
Inicialmente, el autor de este artículo cometió el mismo error, enviando mensajes de una sola frase mal escritos a ChatGPT y esperando excelentes resultados. Rápidamente aprendieron que unas instrucciones deficientes daban como resultado un resultado deficiente. Fue entonces cuando decidieron replantear su enfoque y pensar en ChatGPT como su pasante personal. Al entrenar ChatGPT de manera efectiva, pudieron contar con el pasante más capacitado del mundo y aprendieron algunos consejos esenciales a lo largo del camino.
El autor descubrió que ChatGPT es terrible a la hora de idear cosas «desde cero» cuando se le dan instrucciones vagas como «Escríbeme un hilo de Twitter en X», «Redacta un correo electrónico sobre Y» o «Piensa en ideas sobre Z». Esto se debe a que la IA tiene que tomar demasiadas decisiones arbitrarias, lo que genera un rendimiento deficiente. En cambio, el autor aprendió a darle a ChatGPT tres restricciones claras en cada mensaje: un objetivo específico con entrada, un formato específico para la salida y una lista específica de cosas a evitar. La conclusión clave es que la escritura rápida es un juego iterativo y lleva tiempo hacerlo bien. Una vez que tenga un mensaje confiable y que funcione, podrá usarlo para siempre.
Ver más: Cómo usar ChatGPT y GPT-4 para ganar $1,000 por semana fácilmente
El autor descubrió que existen tres tipos de tareas para las que pueden utilizar ChatGPT de forma eficaz. El primero es ejecutar las plantillas que ellos crean. Se trata de indicaciones que han sido entrenadas para generar resultados específicos en un formato específico. El autor dedicó mucho tiempo a entrenar ChatGPT para generar ideas. Todo lo que tenían que hacer era alimentar al modelo con un tema que querían explorar y generaba dos listas. La primera lista incluía “acciones” sobre las que alguien interesado en ese tema podría tener preguntas. La restricción del autor fue que cada elemento de la lista debía comenzar con un verbo para poder escribir cosas que ayudaran a las personas a realizar esa acción. La segunda lista incluía subtemas y ChatGPT le hizo al autor tres «preguntas» sobre cada subtema. Las respuestas se convirtieron en temas de contenido, y el autor podía crear piezas “pilares” de contenido desde cero respondiendo las preguntas. Luego podrían reutilizar cada parte del «pilar» en contenido de formato breve.
ChatBot de IA – Desarrollado por ChatGPT
Adéntrate en el futuro de la comunicación interactiva con ChatGPT.
Descarga la aplicación ahora.
La segunda forma en que el autor utilizó ChatGPT fue para reescribir y remezclar. A menudo, el autor se quedaba estancado en su patrón de escritura y no podía explorar otras formas de comunicar una idea. ChatGPT fue una excelente herramienta para esto. El autor escribiría su primer borrador y ChatGPT lo reescribiría de cuatro maneras específicas. Primero, le pedirían a ChatGPT que reescribiera sus escritos con seis “tonos” diferentes, incluidos formal, serio, sarcástico, optimista, pesimista y alegre. En segundo lugar, le pedirían a ChatGPT que reescribiera sus escritos con siete autores diferentes, incluidos Gary Vaynerchuk, Maya Angelou, George RR Martin, Winston Churchill, Brene Brown, JK Rowling y Ernest Hemingway. En tercer lugar, le pedirían a ChatGPT que reescribiera sus escritos con siete «objetivos» diferentes, como más concisos, enfáticos, humorísticos, descriptivos, persuasivos, informativos y orientados a la acción. Por último, le pedirían a ChatGPT que reescribiera sus escritos para siete grupos demográficos diferentes, incluidos estudiantes de tercer grado, estudiantes de octavo grado, estudiantes universitarios, madres ocupadas de 40 años, una persona de 80 años que lee lentamente y una audiencia donde el inglés es un segundo lenguaje.
Otra forma en que uso ChatGPT es sintetizar notas no estructuradas en el resultado deseado. Digamos que tengo un montón de notas aleatorias de una reunión o sesión de lluvia de ideas y quiero convertirlas en algo más organizado y coherente. Crearé un mensaje como este:
Objetivo: crear un resumen detallado de las principales conclusiones de la reunión. Formato: viñetas, numeradas. Evite: Oraciones o párrafos largos.
Luego, introduciré las notas no estructuradas y ¡listo! ChatGPT ofrece un resumen limpio y organizado. Esto puede ahorrarme horas de tiempo que de otro modo dedicaría a organizar notas manualmente.
En conclusión, ChatGPT no es un genio mágico que pueda conceder todos nuestros deseos de escritura. Sin embargo, si lo abordamos como un pasante capacitable e invertimos tiempo para crear indicaciones claras y específicas, podemos usarlo para ejecutar tareas de manera rápida y eficiente. Desde ejecutar plantillas hasta mejorar nuestra escritura y sintetizar notas no estructuradas, ChatGPT puede ser una herramienta valiosa en nuestro conjunto de herramientas de escritura.